FLIPPER (BALAZOS)

Corría el año 89, el "Pink Floyd" era un bar que estaba al otro lado de la carretera en el humilde barrio en que me crié. Mi padre solía ir allí algunas noches, a parte de la excelente música (siempre discos de Pink Floyd) había un "cacharro" que me tenía entusiasmado: una máquina de pinball de la "cosa del pantano". Mi padre me daba un par de monedas y me sumergía en un hipnotizante festival de luces y sonidos. Aquello era lo más alucinante que jamás había visto.

Al cumplir 6 años nos mudamos a un piso que estaba justo encima de una sala de recreativos, estaba plagada de grandes clásicos arcade como "Metal slug", "Snowbros", "Caverna ninja"… pero a mi me gustaba echar las monedas en la máquina del rincón, en el pinball.

Estos son los únicos recuerdos que guardo del juego más adictivo al que me he enfrentado nunca. ¿Qué ha sucedido? ¿porqué ya no hay pinballs?

La entrada de hoy es un tanto especial, y es que no se la vamos a dedicar a ningún juego de mesa, es más bien una dedicatoria a lo que para mí es uno de los recuerdos más nostálgicos de mi niñez.

Os invito a quedaros para conocer la historia del pinball.

BING!! BING!!

¿Sabías que el pinball fue ilegal en EEUU durante más de 30 años?

¿Qué recaudó más dinero que toda la industria cinematográfica americana entre los años 1955 y 1970?

¿Que más de 4 millones de máquinas han sido fabricadas desde 1931?

¿Que se componen de más de 3500 piezas y 800 metros de cable?

¿Qué un hombre tarda más horas en fabricar un pinball que un coche?

¿Cuánto tiempo hace que no ves un pinball?

Hubo un tiempo en el que la gente pasaba las horas en salones recreativos, en bares, gasolineras… el ascenso y descenso de una bola de metal rebotando por una maraña de luces y sonidos cautivadores los mantenía totalmente absortos y pegados a una máquina, "Jackpot", "Multiball", "Clink!", "Tap!! Tap!!", "Extra Ball", "Bing!! Bing!!"… Hubo un tiempo en el que estaba en todas partes… hoy, hay muchos niños que no saben ni lo que es.

LOS ORÍGENES

EEUU, durante la "Gran Depresión" o "crisis del 29" surgieron los juegos recreativos en donde se introducía una moneda para jugar una partida. Entre ellos estaba el "Baffle Ball!", un juego con varios palitos o "pin" clavados a una superficie de madera por los que rebotaba una pequeña bola (ball) hasta entrar en uno de los compartimentos denominados "trampa". Es decir, tu lanzabas una bola y te quedabas mirando como rebotaba por todos los "pin" hasta que caía en una de las "trampas", era por tanto un juego de puro azar y casualidad.

Baffle Ball mpdelo "Gottlieb", 1931

Estos juegos se fueron desarrollando a lo largo de los años 30 con el surgimiento multitudinario de compañías, era una industria emergente y con potencial.

De una mesa pequeña fueron evolucionando a una apariencia cercana a las máquinas de pinball actuales, las "patas" y el panel vertical se añadieron en esos años, pero aún carecían de "flippers", seguían siendo juegos de azar.

El epicentro y desarrollo de esta industria se dió potencialmente en la ciudad de Chicago (EEUU). A finales de los años 30 y principios de los 40 había juegos por todos lados.

Esto provocó un curioso efecto, los jóvenes derrochaban mucho dinero en estas máquinas. Las autoridades dictaminaron que era una mala influencia y se etiquetó como un juego de apuestas.

Para entender todo esto es importante recordar el contexto histórico en que vivía la ciudad de Chicago, directamente relacionada con el crimen por culpa de un tal Al Capone. Todas las actividades relacionadas con la mafia, apuestas etc eran duramente castigadas.

De este modo muchas máquinas de pinball fueron confiscadas y destruidas, era ilegal poseer y ganar dinero con su uso. Por lo que en 1938 el pinball fue prohibido en Chicago, Los Ángeles, Nueva York y otras áreas metropolitanas.

Durante los siguientes 30 años siguió considerándose ilegal, pero Chicago continuó fabricando y exportando este tipo de máquinas a Europa, en donde no había ninguna restricción.

Era un invento que no podía existir en su lugar de origen.

El origen del pinball se detona en plena crisis económica mundial

Años 30. Chicago vió nacer el pinball

Al Capone y todas las medidas en contra de actividades "mafiosas" pusieron en el punto de mira al pinball 

Muchas máquina fueron confiscadas y destruidas

FLIPPER

Quedaos con este nombre, "Humpty Dumpty". Fué la primera máquina de pinball tal y como hoy en día se conoce. Los culpables de todo esto son los 6 "flippers" que incluía.

Los juegos de "pin" pasaron de ser juegos de "suerte" a convertirse en juegos de HABILIDAD.

Ahora podías decidir, manejar, manipular la trayectoria y el destino de la bola.

Pero aún hacía falta un poquito más de evolución, quedaba el último paso.

Steve Kordek (1912-2012) era fabricante de máquinas pinball, cogió la idea del "Humpty Dumpty" y la mejoró (sin querer).  En 1947 fabricó una máquina con tan solo dos "flippers", y los situó en la parte inferior del juego. El motivo de esta decisión fue sencillamente la de "ahorrar costes de producción", enseguida se dio cuenta de que este cambio escondía un enorme potencial.

"He visto muchos cambios en los juegos "pin". Pero cuando salieron esos 6 "flippers" con el Humpty Dumpty, yo dije, quiero hacer algo así. Siempre me enseñaron a no invertir mucho dinero en un juego. No voy a poner 6 "flippers" en mi juego. Así que puse 2 en el fondo y ahí es en donde están desde entonces… y eso me hace sentir muy, muy bien."

- Steve Kordek pocos años antes de morir - 

En los años 50 y 60 "Gottlieb" era la productora más potente de pinball, cada 3 meses sorprendían con nuevas máquinas: "Oklahoma", "Gigi", "Sky-line"… cada nuevo modelo creaba furor entre los virtuosos y apasionados del pinball. Los "flippers" fueron revolucionarios.

"Humpty Dumpty", padre del pinball

Este pequeñín lo revolucionó todo

Grabad a fuego esta empresa. Crearon máquinas pinball desde los años 30
hasta mediados de los años 90

"Gottlieb" sacaba máquinas nuevas cada 3 meses

EL REGRESO A CASA

1976, los fabricantes comienzan a presionar a las autoridades para retirar la prohibición de usar estas máquinas en EEUU. Y aquí es en donde apareció "el hombre que salvó el pinball"*, Roger Sharpe.

Publicista y excelente jugador de pinball, era un defensor nato de este pasatiempo.

En ese año acudió a los tribunales para testificar, defender y demostrar que el pinball era un juego de "habilidad" y no de "apuestas". Jugó delante del tribunal y les explicó todo lo que el juego conlleva y significa, como con habilidad se controla el caos.

La apelación triunfó con 6 votos a favor frente a 0 en contra. El pinball volvió a su lugar de nacimiento e inmediatamente lo volvió a acaparar todo.

Había máquinas en las lavanderías, en los cafés, en las gasolineras que ya no reparaban coches usaban los garajes para llenarlos de máquinas, los niños buscaban escusas para escaparse y jugarlo.

El negocio explotó y la industria empezó a generar dinero de una forma impensable, la demanda superaba todas las expectativas. Se empezó a introducir electrónica digital en los paneles, las máquinas de pinball se aprovecharon de los avances tecnológicos y los aficionados y jugadores aumentaron exponencialmente.

Actores de cine, estrellas del rock, políticos… querían jugar al pinball, te los podías encontrar en cualquier salón de la ciudad. Todo el mundo quería jugar, era un fenómeno de masas en donde se unieron todos los estratos sociales, niños, adultos, ancianos, ricos, pobres… Los salones estaban a reventar.

En Europa tuvo una aceptación tremenda. Muchas fábricas destinaban la mitad de la producción a su exportación, "containers" llenos de juegos, literalmente. Se podría decir que el apogeo del pinball se vivió en Europa por encima de EEUU, su lugar de origen y principal productor.

Es comprensible ya que en Europa el mercado era enorme. Tener máquinas "made in the United States of America" era todo un orgullo para los salones europeos, y es que por aquel entonces EEUU era considerado como el "paraíso del mundo". Además el lenguaje del pinball era internacional, fueras del país que fueras sabías lo que significaba "Tilt", "Extra ball", "Game over".

*Os dejo por aquí el enlace a este pequeño documental de 15 minutos sobre la figura de Roger Sharpe, no tiene perdida. Activad los subtítulos ;)

VICE - American Obsesions: "La historia del pinball"

Roger Sharpe haciendo historia

Salón de Kansas, 1970 (Fotografía de archivo)

SEXO, PINBALL Y ROCK AND ROLL

En 1975 se estrena en los cines "Tommy", considerada la primera opera rock de la historia del cine. Compuesta por Pete Townshed y la banda "The Who", es un musical que narra la cruda historia de un chaval llamado Tommy que acaba convirtiéndose en estrella mundial del Pinball.

Inmediatamente el rock and roll y el pinball quedaron enlazados, una cosa era sinónimo de la otra. Adquiere una etiqueta que define la temática de las máquinas posteriores.

Tipos duros, coches, chicas despampanantes… todo enfocado a la fantasía adolescente que el rock and roll trajo consigo.

Hay incluso quien veía una especie de "descarga sexual" en aquello de jugar al pinball, con esos movimientos pélvicos al pulsar los botones y lanzar la bola, esas imágenes de chicas exuberantes que te miraban continuamente mientras jugabas y entrabas en el éxtasis de sumar más y más puntos… hasta que sonaba el "Clunk!" con el que conseguías una bola extra, una partida gratis. Eras el rey de la sala y los sonidos avisaban al resto de personas que lo eras, te convertías durante unos momentos en el centro de atención.

Que la gente se apelotonara alrededor tuyo atraída por los sonidos de tu partida era el premio, ese momento de éxtasis en el que la bola "está caliente" a punto de conseguir el difícil "Multiball".

Era adictivo, te hacía querer jugar de nuevo, volver a intentarlo, mejorar el puntaje e inmortalizar tus siglas en el top de puntuaciones. Si estabas ahí eras alguien.

Una vez que jugabas al Pinball estabas atrapado.

A partir de ahí el pinball se convirtió en una industria lucrativa y en continua expansión, algo que se prolongó hasta la decada de los 80 en donde aparecieron las máquinas "arcade".

Tommy se estrenó en el momento idóneo para que el pinball se definiese por completo como un icono mundial americano

Chicas exuberantes empezaron a plagar los paneles verticales de las máquinas

Aún así no era un pasatiempo exclusivamente para chicos

INSERT COIN

A principios de los años 90 se fabricaron unas cien mil máquinas al año.

"Bally", "Williams", "Data East", "Capcom" y la vieja "Gottlieb" eran los principales fabricantes. Hoy en día la cosa es muy distinta,"Stern pinball" es la única empresa que sigue fabricándolas y los ingresos se reducen a un 10% de lo que se ingresaba entonces. ¿Qué es lo que sucedió?

Solo queda una empresa de pinball
en el mundo

Irónicamente el pinball perdió jugadores y aficionados por culpa de sus propios avances tecnológicos. 

Los displays basados en matriz de puntos con gráficos animados, la posibilidad de que el jugador tomase elecciones, la enorme complejidad en los circuitos internos los hicieron muy complicados.

En los ochenta hubo una división dentro de los apasionados del pinball. Unos se adaptaron a esta complejidad, otros no. Llegaban a tal nivel que tan solo unos pocos entendían como funcionaba la máquina, cada nuevo pinball introducía nuevas variantes, esquema funcional diferente y sus propias reglas. Había que jugar mucho para reconocer patrones y lo que sucedía cuando golpeabas una u otra cosa.

El segundo factor y el más determinante fue el despertar de la industria del videojuego. Esas maquinitas eran cautivadoras, cada una con una propuesta diferente, y no solo eso, se creaban videojuegos como rosquillas. Rapidamente el pinball se quedó como uno más de la impresionante gama de juegos recreativos a los que podía acceder el usuario. Los videojuegos saturaron el mercado.

El interés por el pinball fue cayendo en picado.

Pac-man, Tetris, Super mario, recaudaban unos ingresos impresionantes y sin parangón. Los pinballs comenzaron a acumularse en los rincones de las salas de ocio y poco a poco empezaron a desaparecer. La gente se acostumbró a "derrotar" al juego y empezar con otro, la variedad y diversión se convirtió en "necesidad". Por el contrario el pinball era un juego invencible, siempre te derrotaba, su mayor virtud se volvió debilidad.

El remate fue la aparición de los sistemas de videojuego en los hogares. Ya no se quedaba en los salones de juego, se perdió por completo el factor social e interactivo, ahora jugabas desde tu propia casa. Comprabas una consola minúscula que podía reproducir decenas, cientos de juegos diferentes y adictivos.

La era del pinball había terminado por completo.

Los avances tecnológicos fueron el peor enemigo del pinball...

... y los videojuegos el golpe de gracia

La entrada del videojuego "casero" acabó con las reuniones en salones y se empezó a quedar en grupos "privados"

EXTRA BALL

Peeeeeeero resucitó durante otro breve periódo de tiempo.

En los primeros años de los noventa (91,92 y 93) resurgió de nuevo el interés por el pinball y se llegaron a fabricar unas 120 mil máquinas al año. Los videojuegos le dieron un pequeño respiro que duró hasta aproximadamente 1994, en donde cayó en picado y se hundió más que nunca con la parición de "playstation", "internet explorer" y "nintendo 64".

La mítica "Gottlieb" cerró en el 96, le siguió "Capcom" y en el 99 la todopoderosa "Williams" dejó de fabricar pinballs.

"En verdad ya no es gran parte de nuestra cultura… en verdad… tal vez no quieras grabar esto pero… el pinball muere lentamente"

Steve Ritchie, creador de máquinas Williams

MI PEQUEÑA REFLEXIÓN DEDICADA AL PINBALL

El pinball es un juego único, al contrario que la música o el cine no se puede simular en una pantalla (aunque los videojuegos lo intenten). El pinball hay que sentirlo, hay que tocarlo, hay que "conectarse" a él. Es un juego que no puede actualizarse, adaptarse al nuevo formato digital, es y será por siempre un juego "retro"… nostalgia en estado puro. Conecta directamente con nuestra niñez, con una época añorada. Quizás por esta razón, por esta incapacidad de adaptación esté muriendo lentamente, y dejadme decir que es una enorme desgracia.

La realidad es que los pocos salones de pinball que puedan quedar en el mundo están plagados de adultos y ancianos, que al entrar en esas salas vuelven a ser los críos que vendían botellines de cocacola por 3 centavos para ir corriendo al salón más cercano y tener su duelo con la derrota. 

Ha sido gran parte de la cultura americana y es un símbolo del siglo XX que probablemente esté dando sus últimos estertores. Si algún día ves una máquina de pinball suéltale un par de centavos, hazla sonar, encenderse, dale vida y no dejes que se apague, descubrirás porqué fué lo que es... descubrirás que todos añoramos ser niños de nuevo.

"… y mientras nos hacemos viejos, muchos de nosotros nos apartamos de esas cosas que nos dieron alegrías cuando éramos jóvenes. Y creo que esa pérdida de la inocencia es dura. Y esa es la tragedia, porque sigue habiendo algo que es maravillosamente fascinante en el pinball. Y todos deberían intentarlo en algún momento." 

Roger Sharpe, "el hombre que salvó el pinball"

Y hasta aquí esta emotiva entrada con la que he gozado como nunca. Espero haber despertado en vosotros el sentimiento de respeto y de conciencia de que uno de los símbolos más bonitos del siglo XX se está perdiendo, por suerte quedan por ahí unos cuantos apasionados de los que no me cabe la menor duda que harán lo posible por mantener viva la llama del pinball.

Para cerrar os dejamos con un video sobre una de las máquinas "Williams" más codiciadas y recordadas.

Hasta la próxima vaqueros!!